La gente de los países desarrollados se ha vuelto cada vez más consciente de un medio ambiente más limpio y saludable. Todo el mundo exige una mejor calidad del aire y del agua, una gestión de residuos más adecuada y un uso más preciso de los recursos naturales. Si bien se han logrado avances en determinadas áreas, estas demandas se encuentran sometidas a una presión extrema. Muchos productos consumidos a diario contribuyen en gran medida a estas presiones ambientales y afectan la salud humana de muchas maneras. Al menos, hay alrededor de cien mil productos químicos o compuestos utilizados en las actividades de producción, y muchos de ellos aún no tienen regulaciones legales. Estos productos químicos continúan teniendo efectos tóxicos, alergénicos y bioacumulativos en la salud de las personas en diversas etapas de su ciclo de vida.
El programa ECO LABEL ha surgido con el objetivo de definir productos verdaderamente ecológicos. El sistema de acreditación ECO LABEL es un programa en el que los consumidores confiarán y los fabricantes comercializarán estos productos con etiquetas ecológicas bajo el logotipo ECO LABEL.
Las personas ahora son mucho más conscientes de sus impactos en la salud y el medio ambiente, y están recurriendo a productos que funcionan con altos estándares. A pesar de esto, la mayoría de las personas no son lo suficientemente conscientes de los efectos ambientales de sus preferencias de consumo diario y no actúan de manera responsable.
Las empresas fabricantes y minoristas generalmente utilizan cualquier aspecto ecológico de un producto como herramienta de marketing. Sin embargo, ignora los aspectos insostenibles de estos productos. Intenta presentar fácilmente un producto como ecológico y respetuoso con el medio ambiente sin una validación adecuada. Esta situación, naturalmente, confunde a los consumidores. Sin embargo, muchos de estos productos contienen materiales, incluido el embalaje, que contribuyen fácilmente a la contaminación del agua, la contaminación del suelo y las emisiones atmosféricas, y provocan la acumulación de sustancias químicas tóxicas en los cuerpos de las personas y el medio ambiente.
Por estas razones, la etiqueta ECO LABEL significa mucho y, de hecho, los productos de todo el mundo deben cumplir con los estándares ECO LABEL. Sin embargo, el programa ECO LABEL es un sistema voluntario. Por lo tanto, para fomentar la participación de las empresas de fabricación, estas empresas deberían ser más conscientes de los beneficios económicos y ecológicos de actualizar sus productos a los estándares ECO LABEL. requerido. Asimismo, los consumidores deben ser más conscientes tanto de su propia salud como de los beneficios ambientales de la compra de dichos productos.
Los productos con la etiqueta ECO LABEL tienen demanda en todo el mundo. Porque ECO LABEL se enfoca no solo en reducir los químicos o compuestos peligrosos, sino también en el impacto ambiental más amplio de los productos. Por ejemplo, utilizando recursos materiales renovables, reciclados y gestionados de forma sostenible, o reduciendo la energía y las emisiones de gases de efecto invernadero en la producción, o mejorando el rendimiento medioambiental durante la vida útil del producto.
En este período en el que el equilibrio ecológico se deteriora de manera casi irreparable, nuestra organización actúa con sentido de responsabilidad y trata de apoyar a los fabricantes de diversos sectores para que demuestren sus esfuerzos ecológicos.